Hoy hemos pasado un rato agradable con Chema, un científico que nos ha demostrado que la ciencia también puede ser muy divertida. Durante más de una hora, en el gimnasio, nos ha deleitado con una serie de experimentos que nos han dejado con la boca abierta, como por ejemplo, meter un huevo duro dentro de una botella, hacer volar una pelota de tenis de mesa o inflar un globo con bicarbonato y vinagre. Lo mejor, sin duda, ha sido el final, cuando hemos salido al patio y hemos visto despegar un cohete que Chema ha construido con la única ayuda de una botella de plástico, agua y una bomba de inflar bicicletas. ¡Menudo despegue!
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